12 Lugares que ver en Navalcarnero imprescindibles

Navalcarnero, con sus más de 500 años de historia, es uno de los municipios de la Comarca Sur de Madrid más interesante. Menos de 30 kilómetros lo separan de la capital de España y, gracias a su importancia durante la Edad Media, hay mucho que hacer en Navalcarnero.

La zona sur de Madrid fue bastante conflictiva durante el reinado de los Reyes Católicos. Para acabar con la sustracción de tierras, se fundó la población de Navalcarnero en medio de los terrenos desde la ciudad de Segovia. En 1617 consiguió ser villa independiente. Sin embargo, Navalcarnero vivió su evento más importante en 1649 al acoger la boda entre el rey Felipe IV con Mariana de Austria, lo que le valió para conseguir el título de Villa Real de Navalcarnero.

Hoy en día, Navalcarnero es un destino turístico interesante por combinar su herencia histórica con la modernidad. Por eso, vamos a ver las cosas más interesantes que ver y hacer en Navalcarnero.

Qué ver en Navalcarnero

Te mostramos los lugares imprescindibles que tienes que visitar para hacer turismo en Navalcarnero en un día sin perderte nada importante:

Caminar por la plaza de Segovia

Este es el corazón del municipio, la plaza Mayor, un espacio rodeado de encantadoras calles adoquinadas y edificios históricos. Este es el lugar perfecto para comenzar la visita a Navalcarnero y dar un paseo, disfrutar de una comida al aire libre en sus terrazas y experimentar la vida local.

Como no podría ser de otra manera, su nombre es en honor de la ciudad de Segovia que fundó la villa ya en 1499. Aunque luchó por ser independiente, Navalcarnero nunca ha renegado de sus orígenes. Su estructura es irregular pero típicamente castellana con dos lados porticados y el Ayuntamiento.

Conocer la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción

Desde la plaza de Segovia se tienen ya vistas de esta iglesia. Este es el principal templo religioso que ver en Navalcarnero y fue declarado Monumento Histórico Artístico.

Aunque tiene una peculiar mezcla de estilos arquitectónicos, predomina el renacentista (con elementos barrocos y góticos) dado que data del siglo XVI. Su campanario visible desde casi cualquier parte del pueblo tiene un llamativo capitel barroco y, en su interior, se pueden contemplar sus retablos y la imagen de la patrona de la villa, Nuestra Señora de la Concepción.

Pasear por la plaza de la Veracruz

Los lugares anteriores están unidos por un pequeño pero coqueto espacio, la plaza de Veracruz. Además de ser una zona de paso, esta discreta plazuela alberga la ermita con la que comparte nombre y que se construyó gracias a donaciones de los cofrades.

El edificio primitivo de la ermita ha sufrido remodelaciones y ampliaciones, especialmente tras la Guerra Civil y en el año 2000. Durante esta última restauración se consiguieron recuperar unas obras sobre la Pasión de Cristo muy importantes.

Ver la Casa de la Cadena

La Casa de la Cadena fue el edificio en el que se casaron el rey Felipe IV y Mariana de Austria, además de ser su casa nupcial. Actualmente, nada queda de la casa original. Sin embargo, en una rotonda frente al Ayuntamiento nuevo se ha hecho una reproducción de la fachada principal cogiendo como muestra un grabado de la época.

Ir hasta la plaza del Teatro y el Teatro Municipal

El centro neurálgico de la cultura de Navalcarnero al aire libre es la plaza en la que se encuentra el teatro. En este espacio, cada año se celebra el Certamen de Teatro Aficionado junto con multitud de eventos de diferentes disciplinas artísticas.

Además, cerca también está la Casa de la Cultura con su patio interior y con su estética de casona solariega.

Recorrer las ermitas de Navalcarnero

Además de la ermita de la Veracruz de la que ya hemos hablado, resulta interesante dar un paseo para conocer el resto de ermitas de Navalcarnero. Se cree que la más antigua es la ermita de San Cosme y San Damián y estaba a cargo de la cofradía que le da nombre y que se encargada de curar a pobres enfermos.

La siguiente parada es la ermita de la cofradía de Nuestro Hermano Jesús Cautivo del Amor, un edificio moderno de 2005, aunque la cofradía ya se reunía aquí desde 1987.

Otras opciones son la ermita de San Isidro dedicada al patrón de los agricultores, la ermita de San Roque cuyas pinturas tienen una calidad excelente, la ermita de Santa Águeda repleta de pinturas de Pirrongelli y la ermita de San Juan Bautista que se ha convertido en la capilla del cementerio.

Disfrutar del CINC (Centro de Interpretación de Navalcarnero)

Una antigua casa de labranza ha sido adaptada para acoger un sinfín de exposiciones permanentes y temporales. Aquí se pueden conocer los 500 años de historia de la villa, ver salas dedicadas a las tradiciones de Navalcarnero, conocer la importancia del vino y pasear por unas cuevas auténticas.

La visita dura 45-60 minutos, la entrada tiene un precio de 2€ (1.50€ la tarifa reducida) y abre los fines de semana en horario de 11 a 14 h y de 17 a 19 h.

Ver las esculturas

La villa de Navalcarnero está repleta de esculturas. El objetivo no es solo estético, estas piezas buscan honrar a los vecinos y a sus tradiciones. Por eso, paseando por sus calles se puede hacer una ruta por las esculturas de Navalcarnero.

Una de las más llamativas es el gran conjunto que hay frente al ayuntamiento como homenaje al primer alcalde que da nombre a la plaza: Francisco Sandoval. En la plaza del Teatro hay una pareja bailando una jota y entre las calles Real y Libertad una escena de unos encierros. Pero lo que más llama la atención es que por el municipio hay discretas esculturas que representan los oficios más tradicionales de Navalcarnero.

Descubrir los murales y trampantojos

Las calles de Navalcarnero están adornadas con impresionantes obras de arte callejero que añaden un toque contemporáneo a su rica herencia histórica.

Paseando por las calles de la villa se pueden ir descubriendo trampantojos y murales por fachadas de edificios corrientes mayoritariamente. En el plano que se entrega en la Oficina de Turismo de Navalcarnero vienen marcadas las 14 pinturas disponibles. Una de las más curiosas es la del Museo del Vino, pero lo ideal es conocerlas todas mientras se visita el pueblo.

Contemplar el Chrystal Garden

El artista estadounidense Dennis Oppenheim ha dejado su huella en una discreta villa del sur de Madrid. Navalcarnero tiene una especie de jardín transparente como metáfora de la naturaleza y con la idea de abrir nuevos espacios y sacudir comportamientos, según el propio artista.

A la entrada de Navalcarnero ha una estructura negra de acero y hierro con paneles transparentes perforados. Sus ángulos forman una estructura que se puede atravesar por una bóveda y que con la luz produce ciertos espejismos.

Dar una vuelta por el parque histórico de San Sebastián y la escultura de Isabel Católica

Este espacio verde en pleno municipio madrileño nació en torno a una ermita que le daba nombre pero que ya no existe. Actualmente es un lugar en el que conectar con la naturaleza mientras se conoce la historia de Navalcarnero, pues hay un paseo de personajes ilustres de la villa como Sebastián Muñoz.

Esta ruta se comienza a la entrada con la escultura de Isabel la Católica. La reina estaba en su trono cuando se fundó Navalcarnero, de ahí su importancia. Tras ella aparecen el resto de personajes entre los que se encuentran Jacinto González, que llevó el agua potable a Navalcarnero, o Mariana de Austria.

Visitar las bodegas Muñoz Martín

Navalcarnero forma parte de la Denominación de Origen Vinos de Madrid y el municipio tiene una larga tradición vitivinícola que comienza con el cultivo de la vid.

Para conocer todo el proceso, la historia y la relación de la villa con el vino, no hay un plan mejor que visitar alguna bodega. Las Bodegas Muñoz Martín ofrecen una ruta por los viñedos, la cueva y por las instalaciones que termina en una cata de sus vinos.